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¿Sabías que? Volar en avión deteriora la piel.

  • Everyday Health
  • 5 mar 2016
  • 4 Min. de lectura

Cuando volamos, el aire presurizado de la cabina absorbe la humedad de nuestra piel, dejándola seca y con aspecto mortecino y sin brillo. Tras el aterrizaje, el deterioro de nuestro cutis suele ser proporcional a la duración del viaje. ¿Qué podemos hacer para proteger nuestra piel y que no parezca agotada cuando tomamos tierra?

Las cabinas de los aviones están presurizadas mediante aire acondicionado de baja humedad, lo que, cuando se vuela a mucha altitud, crea un ambiente seguro y confortable para los pasajeros y la tripulación y les protege del riesgo de sufrir losproblemas fisiológicos que causaría la baja presión del aire exterior. Pero lo cierto es que ir en avión afecta a la piel. Los primeros efectos sobre la piel de la cara y del cuerpo son consecuencia de la deshidratación: piel seca, labios cortados y nariz, manos, garganta y ojos secos. Además, nuestro cuerpo responde a la fatiga del jet lag liberando cortisol, la hormona del estrés, que afecta a la función barrera de la piel y causa rojeces, manchas y erupciones.

Otras reacciones de la piel tienen que ver con la inmovilidad (que provoca retención de fluidos en los tobillos, rigidez en las articulaciones y manos y ojos hinchados) y también con la radiación ultravioleta.

La experta en cuidados de la piel Renée Rouleau llevó a cabo un simple experimento: mojó con la misma cantidad de agua una camiseta de algodón 100% en una habitación de un hotel de Boston un soleado día de diciembre y otra en un avión que volaba a 11.000 metros de altitud, cronometrando el tiempo que tardaban ambas en secarse. La camiseta del hotel se secó en una hora y 27 minutos, mientras que la del avión estaba seca al cabo de 24 minutos.

Con respecto a la humedad ambiental, nuestra zona de confort se sitúa alrededor del 50%; sin embargo, la humedad relativa en un avión está normalmente por debajo del 20%. Este ambiente seco combinado con una presión superior en cabina reduce el suministro de oxígeno a la piel, altera la microcirculación y afecta a su regeneración, lo que acelera su envejecimiento. Las pieles secas se secan más y las grasas se vuelven más aceitosas debido a que la pérdida de agua genera una sobreproducción de sebo.

Trucos para ir en avión

Saber lo que convienen hacer cuando estamos volando nos ayudará a prepararnos antes de empezar el viaje.

A bordo…

  • Hidrate su piel por dentro y por fuera: beba mucho líquido y aplique un hidratante en la piel, teniendo especial cuidado con la cara, los labios, las manos y las uñas.

  • Coma fruta fresca y verduras para obtener un suministro lento de hidratación, ya que puede perder nutrientes valiosos si visita el baño demasiado a menudo.

  • Si utiliza un espray de agua termal, asegúrese de aplicar crema hidratante justo después. El aire seco captura agua allá donde puede; por lo tanto, si usted hidrata inmediatamente la piel húmeda la hidratación persistirá más tiempo.

  • Evite llevar maquillaje, especialmente en los vuelos de larga distancia.

  • Evite el alcohol y el café, ya que ambos tienen efectos deshidratantes y absorben agua de las células del cuerpo.

  • Evite alimentos ricos en grasa, azúcar y sal, ya que son deshidratantes y pueden secar la piel.

  • Si tiene la piel grasa, séquela de vez en cuando con una toallita de papel para eliminar el sebo y las bacterias que pueden causar acné.

  • Trate de dormir durante el vuelo, ya que la piel se regenera mientras dormimos. No dormir no sólo produce aspecto de cansancio, sino que también afecta al sistema inmunitario.

  • Estire las piernas con frecuencia o incluso levántese y dé cortos paseos para mejorar la circulación sanguínea.

  • Aplíquese un protector solar con FPS de 15 para evitar la radiación ultravioleta. Su piel está más expuesta a la radiación porque el avión vuela más cerca del sol y la atmósfera es menos densa.

Antes de volar…

  • Trate de cuidar su salud antes del vuelo, pues un viaje en avión puede empeorar cualquier enfermedad que usted ya tenga.

  • En los días previos al viaje incremente la cantidad de agua que ingiere, evite alimentos deshidratantes y coma mucha fruta y verdura.

  • Use una cantidad extra de crema hidratante los días anteriores al viaje, sobre todo por la noche.

  • La noche antes del viaje exfolie su cutis y aplíquese una mascarilla facial hidratante.

  • Ponga en su equipaje de mano cremas para las manos, la cara y los labios en envases las de medidas autorizadas. No olvide añadir esprays o gotas especiales si su nariz o sus ojos tienden a la sequedad, por ejemplo si usa lentes de contacto o sufre hemorragias nasales.

Tras tomar tierra…

  • Cuando llegue a su destino limpie su cutis para eliminar el exceso de células muertas y de grasa y aplíquese una mascarilla hidratante para que su piel recupere el brillo.

  • Sumérjase en agua y deje que su piel se hidrate a través de los poros: tome un buen baño o nade un rato en el mar.

Durante los primeros días después del viaje hidrátese bien interior y exteriormente y verá cómo rápidamente su piel recupera su lozanía y su aspecto saludable.


 
 
 

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